Las contraventanas protegen contra robos, evitan corrientes de aire y protegen la privacidad del hogar. Hace un tiempo fueron desplazados por persianas y cortinas, que son más prácticas. Sin embargo, todavía quedan encantadores y hoy en día se perciben cada vez más como un elemento decorativo. Las contraventanas de madera, a menudo pintadas de una manera que contrasta el color de las paredes, se asocian con la elegancia simple y pasada de moda de los tiempos pasados, así como con el paisaje idílico salpicado de casas de ladrillo rojo. Hoy podemos ver los detalles arquitectónicos que son similares a los del pasado, incluyendo persianas de moda en estilo provenzal, así como estilo rústico o vintage.