La región francesa de Borgoña se asocia comúnmente con el vino, pero también con paisajes llenos de vegetación y un ambiente idílico: la vista de la casa con contraventanas de madera cubiertas de vid podría considerarse como un símbolo de Borgoña. El color específico o el enrojecimiento oscuro y profundo se denomina frecuentemente "color burdeos". El nombre proviene del color del vino que se produce en la región.