El glaciar Jostedalsbreen, el más grande de Noruega (área de 600 kilómetros cuadrados), se encuentra en el barrio de la ciudad llamada Briksdal. Desde ese pueblo sale la ruta turística más concurrida. El camino hacia el glaciar pasa por valles y numerosas lenguas de hielo, así como por cascadas (los turistas tienen que pasar por debajo de una de ellas). Después de llegar al frente del glaciar, es posible ir más lejos solo cuando el clima es favorable y con la condición de estar equipado con un equipo de escalada adecuado.