Bangkok se llama con frecuencia la Venecia del Este; debe este nombre a los numerosos canales que atraviesan la ciudad. La infraestructura del agua ha contribuido al desarrollo de los llamados mercados flotantes. En el pasado, antes de que se establecieran las rutas terrestres, estos canales habían sido la principal vía de intercambio de mercancías. Hoy, principalmente debido al turismo masivo, los mercados flotantes experimentan un resurgimiento. En “callejones” coloridos se puede comprar de todo: desde frutas y verduras hasta sombreros y joyas. Casi todos los hoteles del barrio organizan viajes para que los turistas puedan probar los mercados flotantes.