Las perlas, así como el nácar, consisten en carbonato de calcio y conquiolina. Se forman dentro del tejido blando de los mejillones en reacción a una sustancia extraña que entró en sus caparazones. Desde que se han utilizado ampliamente en joyería, la gente empezó a utilizar perlas cultivadas. Estas perlas se producen colocando granos de arena en la concha del molusco. Las perlas se han considerado joyas de gran valor durante siglos. Se utilizan en la producción de collares en forma de cuerdas, o se pueden engastar en oro y plata. Las perlas han inspirado a generaciones de pintores, escritores, poetas y músicos. También están asociados con algunas supersticiones, p. Ej. Se cree que no debes regalarlos ni usarlos para la boda, porque te traerán lágrimas y desgracias.