Finlandia es un país relativamente rico con ciudades modernas, sin embargo, su gente aprecia la tradición, la sencillez y el contacto con la naturaleza. Por lo tanto, no debería sorprender que se sientan mejor entre los edificios clasicistas de colores brillantes del centro de la ciudad, lo que confirma de alguna manera el amor finlandés por la simplicidad y el minimalismo. Debido a su arquitectura característica, Helsinki es a menudo llamada "la ciudad blanca del Norte". También vale la pena señalar que la capital de Finlandia es una de las ciudades más verdes de Europa: allí podemos encontrar numerosos parques y plazas, así como muchos árboles a lo largo de las principales calles de la ciudad. Todos estos crean la imagen de la ciudad con la atmósfera que captura a la perfección la pasión de sus habitantes.