Durante el proceso de cultivo de flores en macetas es necesario prestar atención a sus necesidades en cuanto a intensidad de luz diurna. Es imprescindible imitar el entorno natural de las flores cultivadas al menos parcialmente. El riego es la segunda condición importante: las plantas que se originan en regiones relativamente cálidas y secas no necesitan tanta agua como las demás. Obtener información sobre una especie en particular garantiza que las plantas complacerán los ojos de sus propietarios.