Las verduras rojas son una rica fuente de vitaminas y minerales, ya que neutralizan los radicales libres, lo que nos permite retener la juventud por más tiempo. El pimiento rojo y el tomate contienen vitaminas B, vitamina C, magnesio, hierro, calcio, potasio y betacaroteno. Los vegetales verdes son los más saludables cuando los comemos crudos. Contienen clorofila, a la que deben su color y propiedades beneficiosas. La lechuga nos aporta ácido fólico y tiene cualidades antibacterianas y antitumorales, además, contiene muy pocas calorías. Los guisantes, especialmente los jóvenes, se consideran una verdadera bomba de vitaminas. Es importante recordar que todas las verduras frescas son muy saludables, ayudan a adelgazar, además de apoyar el correcto funcionamiento y la inmunidad. Salvo algunas excepciones, podemos comerlos prácticamente sin restricciones.
