Omiš es una ciudad croata situada en el centro de Dalmacia, donde el río Cetina desemboca en el mar Adriático. La ciudad es amada por los turistas por sus playas llenas de conchas, puestos de fruta fresca y los restos de dos fortalezas que recuerdan la turbulenta historia del asentamiento que gustaba especialmente a los piratas del siglo XII. La ubicación conveniente de la ciudad, entre Split y Makarska, así como los paisajes impresionantes, son los factores que animan a visitar Omiš. La costa está rodeada de escarpados acantilados y densos pinares.