La belleza se puede encontrar no solo en las cosas que están limpias y bien cuidadas: los objetos que comúnmente se consideran “feos” también representan inmensas cualidades estéticas. Los turistas que visitan Portugal pueden admirar no solo los edificios modernos mantenidos por los residentes actuales, sino también las casas de vecindad que han sido abandonadas o incluso en ruinas. Sin embargo, esta arquitectura permite advertir elementos dignos de admiración, así como elementos característicos de la edificación portuguesa.