El Palacio de Pena en Sintra se encuentra en la cima de una colina en las afueras de Lisboa. El palacio fue construido en el siglo XIX y se inspiró en la arquitectura renacentista, gótica y árabe. Su forma ecléctica se enfatiza por la elección de colores de fachadas, diferentes para cada parte del palacio. Fue construido como la sede del rey Fernando II y hoy es un monumento nacional. Hay un museo en el edificio, también se utiliza ocasionalmente como residencia del presidente de la República de Portugal. Debido a su carácter único, el palacio de Pena es una de las siete maravillas de Portugal. También ha sido incluido en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.