El edificio del Hospital de la Ciudad de Nuremberg se inauguró en la primera mitad del siglo XIV. El hospital, ubicado en parte directamente sobre la corriente de uno de los brazos del río Pegnitz, fue erigido por iniciativa del rico burgués Konrad Groß, con el tiempo se agregaron una capilla de Todos los Santos y una farmacia. Las joyas de la corona se guardaron en el edificio desde el siglo XV hasta los últimos años del siglo XVIII. Hoy, el edificio histórico del Hospital del Espíritu Santo con una característica torre puntiaguda que corona el ventanal es el orgullo del casco antiguo de Nuremberg. Sus interiores incluyen un elegante restaurante y una residencia de ancianos.
