El Ayuntamiento de Wernigerode, una ciudad alemana ubicada en la parte central del país, como muchos edificios históricos en esta ciudad, fue construido en el siglo XV con el uso del método de entramado de madera. Las paredes de entramado de madera se crean como resultado de llenar la construcción de madera con ladrillos. Las vigas solían estar impregnadas de alquitrán, que las tiñaba de negro, mientras que el relleno estaba enlucido y pintado con pinturas brillantes, dando a los edificios un aspecto característico. Las construcciones con entramado de madera eran populares principalmente en el norte de Europa: en Alemania, Francia, los países del Benelux y Escandinavia. En Polonia, esta técnica se llama muro prusiano debido a que fue traído a territorios polacos desde Prusia.
