La Navidad se celebra en el círculo cultural cristiano, principalmente en Europa y América del Norte, estos son días no laborables y familias enteras disfrutan de una celebración solemne. La Navidad cae en invierno en los países del norte, por eso los platos calientes tradicionales se sirven con bebidas calientes. En su preparación se utilizan frutas cítricas, como naranjas, limones o mandarinas, así como especias (clavo, canela, anís o jengibre). Forman una combinación perfecta, dando a las bebidas un aroma distintivo y mejorando sus propiedades de calentamiento.