El hilo está hecho de finas fibras retorcidas como lana, algodón, seda o poliéster. Por lo general, se venden enrollados en un carrete de plástico, madera o cartón, lo que evita que se enreden y se anudan. El hilo, además de su función utilitaria, ocupa un lugar importante en la cultura europea. En la mitología griega y romana, las tres diosas del destino tejieron el hilo de la vida humana. Por otro lado, Teseo, el mitológico asesino del Minotauro, escapó del laberinto gracias a una bola de hilo que recibió de Ariadna.