Trozos de fruta fresca sumergidos en chocolate es un gran snack que conquistará el corazón de los gourmets más exigentes. La composición estética de ingredientes coloridos puede servir como decoración de mesa durante una fiesta familiar o infantil. Las fresas agridulces, las frambuesas, las uvas, los melocotones y los arándanos servidos en compañía de una salsa de chocolate aterciopelada reemplazarán con éxito los postres sofisticados, cuya preparación a menudo requiere muchas horas en la cocina. Las brochetas de frutas también son una buena merienda para los más pequeños.