Una de las mezquitas más grandes de Asia Central, con capacidad para 5.000 fieles, se encuentra en la capital de Kazajstán, Astana. El templo de Nur-Astana es visible desde lejos gracias a una enorme cúpula dorada, que tiene 40 metros de altura y está rodeada por cuatro minaretes de 64 metros. Estos números no son aleatorios ya que el primero es la edad del Profeta Muhammad cuando recibió las revelaciones y el otro es la edad del Profeta a su muerte. La mezquita fue construida en 2005 y es el regalo oficial del sultán de Qatar para el presidente de Kazajstán, Nursultan Nazarbayev.