Al elegir un destino de vacaciones, muchas personas deciden visitar países cálidos y tropicales, que ofrecen no solo la belleza del paisaje y la naturaleza, sino también mucho sol. La exposición a los rayos solares tiene un impacto muy positivo en el cuerpo humano, aportando beneficios tanto para el cuerpo como para el alma. Los antiguos griegos y romanos recomendaban que los soldados tomaran el sol para mejorar su aptitud y valentía. Es un hecho bien conocido que el sol aumenta la producción de testosterona y melatonina y por esa razón un hoplita bronceado podría ser más efectivo. Además, el sol exhibe propiedades antidepresivas y analgésicas, favorece la pérdida de peso, la producción de vitamina D y la regeneración de la piel.