Las palmeras pertenecen a la familia Arecaceae (también llamada Palmae). Crecen principalmente en los trópicos. Estas plantas se caracterizan por tener hojas grandes que se asemejan a la forma de una pluma o abanico. Las hojas suelen estar ubicadas en la aguja de un tronco alto y no ramificado. Las personas que viven en un clima templado asocian las palmeras con las vacaciones en los trópicos y las delicias exóticas, como los cocos o los dátiles. El aceite de palma derivado de la palma africana se utiliza ampliamente en la industria alimentaria y cosmética.