Las terrazas agrícolas son características principalmente del paisaje del este de Asia, un área famosa por cultivar varios tipos de arroz, pero también se encuentran en las laderas de los Andes. Están construidos para agrandar el área cultivada en las suaves pendientes de las colinas. En el borde de la terraza se construye un pequeño terraplén de tierra o piedra que evita que el agua caiga por la pendiente, ya que podría destruir la estructura de la terraza. Además, la retención de agua es necesaria para el correcto crecimiento de las plantas. Las terrazas, que son enormes, se construyen a mano con el uso de un azadón, aplicando métodos tradicionales conocidos desde hace cientos de años.