La fabricación de tejidos tiene una larga tradición en el Continente Oscuro. El algodón es la materia prima básica de la que se ha obtenido el hilo durante siglos, sin embargo, en algunas regiones se utiliza lana de camello o cabra y rafia. Tradicionalmente, en las comunidades africanas, tejer es una actividad exclusiva de los hombres y las mujeres no pueden hacerlo. Sin embargo, juegan un papel particular en el proceso de creación de tejidos, ya que se ocupan del teñido de hilos y tejidos acabados. Gracias a las mujeres, los tejidos africanos son tan coloridos y diversos.