El chocolate y el café tienen mucho en común. Muchos gourmets de ambos manjares no pueden imaginar la vida sin ellos. Otro elemento que ambos tienen en común es la cafeína, que también contiene el chocolate, aunque en menor cantidad que el café. A veces, el café es una adición de sabor que se agrega al chocolate. Aparte de eso, un chocolate pequeño es un complemento perfecto para una taza de café.