Los orígenes de la medicina china se remontan a varios miles de años y están estrechamente relacionados con la filosofía de Oriente, en la que la armonía entre el yin y el yang, así como el enfoque holístico del ser humano, su cuerpo y mente, son lo más importante.. En la medicina tradicional china, la dieta juega un papel muy importante. Tanto la prevención como el tratamiento de las enfermedades diagnosticadas están dominados por productos vegetales naturales: frutos secos, semillas, raíces y hierbas. Entre los medicamentos más populares de la medicina china se encuentran la madreselva, el jengibre, el ginkgo, el té verde, el ginseng, la canela y los crisantemos.