Las frambuesas y las fresas son regalos de verano saludables, bajos en calorías y sobre todo muy sabrosos. Son ingredientes perfectos de postres y snacks, que no solo endulzarán nuestra tarde de verano, sino que también nos aportarán importantes vitaminas y minerales. Se pueden añadir deliciosas frutas de temporada a pasteles, bizcochos y jaleas, acompañadas de helado, sémola, nata montada o yogur. El sabor único de las frambuesas y fresas frescas se puede disfrutar solo unos pocos meses al año, por lo que es una buena idea congelar algunas frutas y almacenarlas para el invierno.