El requesón popular es un producto elaborado con leche de vaca, tiene una textura granulada y un sabor delicado. Es nutritivo y tiene mucha proteína, por lo que debes consumirlo en el desayuno o después del entrenamiento. El requesón se puede comer dulce, salado y sin aditivos. El queso granulado de granjero contrasta muy bien con el sabor distintivo del rábano y la cebolleta fresca. Sabe mejor cuando se acompaña de pan crujiente de buena calidad. Una comida así, enriquecida con verduras frescas, satisfará el hambre y nos proporcionará energía para todo el día.