Las especias son aparentemente pequeñas, pero de hecho son un ingrediente muy importante de la mayoría de los platos. Los aditivos aromáticos, generalmente en forma de partes secas y en polvo de las plantas, están destinados a cambiar el sabor, el olor y, a veces, incluso el color de los platos. Las especias también tienen propiedades conservantes y, a veces, ayudan a nuestro sistema digestivo. En los viejos tiempos, algunas especias se consideraban muy valiosas y tratadas como moneda de curso legal. Hoy en día, el azafrán es la especia más cara del mundo, mientras que las estrellas de anís son visualmente más impresionantes.